China está decidida a tirar adelante su estrategia de ser lideres mundiales de la nueva tecnoeconomía basada en las nuevas cadenas de valor industriales (movilidad eléctrica, nuevas energías, salud digital, agroalimentación, etc.) a la vez que proveer a su población (y mercado). Todo ello con las últimas tecnologías disponibles (quantum, hidrógeno, biotecnologías, IA, blockchain, tecnologías del espacio, etc.).
China ha planificado que necesita para ello: materias primas, logística, etc. y llevan años adquiriendo todo lo que les es necesario de fuera, una conquista económica silenciosa de empresas, materias primas, conocimiento, tecnología y talento. Por ejemplo, recientemente ha firmado un acuerdo con Zimbabue para crear un parque de metales (litio y cobalto) destinado a la producción de baterías por 2.839 M$, el nuevo oro blanco para la industria de automoción eléctrica. Es decir, ha adquirido la economía de Zimbabue al mismo tiempo que el puerto de Hamburgo y con este ya van más de 100 puertos en 63 países.
Bajo el lema China primero, hace que sus empresas de chips provean a los suyos. La política digital va de la mano de la industrial y ya hace más de un año que intenta diseñar un gemelo industrial, un banco de pruebas para las empresas chinas, el Chinaverse.
La política del hijo único y el envejecimiento, empieza a ser un problema. India, su vecino, es en cambio un país joven, anglófono, democrático y creciente mientras que China es industrial, integrado en la economía mundial y con mejores infraestructuras.
Como ejemplos, China tiene ya la mitad de las cámaras del mundo, además de ir por delante en computación cuantica e IA. Mientras India es ya el tercer país del mundo que más publicaciones científicas después de la propia China y EUA, tanto es así que las principales empresas tecnológicas americanas han tenido o tienen un CEO indio. En número de usuarios de internet China es el primero con 934M y India el segundo con 697M, juntos un tercio de los usuarios actuales del mundo (4,8M). Claramente la suma -Chindia- sería imparable, esperemos que en positivo para todos.
Sumar es más sencillo que separar y en este sentido esperemos que China desista en su intención de nacionalizar internet, en línea con todo lo anterior, creando una gran muralla china digital.
PD: En la era del humanismo tecnológico, cuidado con los tóxicos, trepas, troyanos y trolls (T-) y rodearos de Sinergentes que siempre suman aptitudes, conocimiento, equipo y valores.